Se escapa otra oportunidad para sentenciar la permanencia

Parece un tópico, pero no es la primera vez que se dice eso de: "jugamos mejor contra los equipos de arriba, que contra los de abajo". ¿No os suena? Yo no paro de escucharlo. Entre el Begues y el Espanyol, parece que estoy condenado a sentir una y otra vez este tópico del futbol.

A balón parado tampoco se pudo marcar.

El de este fin de semana era uno de los desplazamientos largos de la temporada. El Begues visitaba el Juventud 25 de Septiembre de Rubí, un equipo en serias dificultades para mantener la categoría, según muestra la clasificación. En el campo, esta segunda catalana, tiene estas cosas: es una categoría súper competitiva, y la verdad hay veces que no soy capaz de apreciar diferencias substanciales entre los equipos de media tabla y los que están en el pozo. No sé si será ese factor psicológico de jugar contra equipos de la parte baja de la clasificación, que provoca un extraño efecto de sedamiento de nuestros jugadores. Al equipo local le bastó poner un punto más de intensidad que  nuestros para endosarnos un contundente 3-0 Solamente durante unos 10-15 minutos justo después de encajar el 2-0, el equipo fué capaz de jugar bien, dominar al rival, y hacer buenas combinaciones y transiciones. El resto de partido un "toma y daca", que por la mayor intensidad de los locales, hicieron declinar la balanza de su lado. Nuestro equipo jugó demasiado estirado, consiguió sacar bien la pelota entre la defensa y el centro del campo, pero llegar arribar era otra cosa. Lo más peligroso eran desplazamientos en diagonal a Uri para su prolongación, y doblada de Miki. A partir de ahí, atacábamos con 3 jugadores contra 5 defensores locales. No daba tiempo a llegar al resto del equipo a la zona de ataque. Imposible desbordar en un campo pequeño y con un rival muy metido en el partido.

Me gusta los campos que se respira ambiente familiar
alrededor del bar. Si además acompaña el día con solecito,
es la leche! Lástima del resultado...

En definitiva, otra oportunidad que dejamos escapar. Jode mucho desplazarse hasta Rubí, vía C-16 (previo pago peaje) gracias a la mierda del GPS del móvil; llegar tarde al partido;  sentir la impotencia de ver a 5 metros tuyos cómo le dan un guantazo a un jugador nuestro con el balón en la otra punta del campo, y encima que un seguidor local le recriminae que no haga cuento; todo esto para ver perder a tu equipo dando una mala imagen. Pero bueno, nadie me ha pedido que vaya a los partidos. Días como los del pasado domingo me hacen replantear seguir al equipo a los desplazamientos largos. Quizá sea que todavía estoy con el bajón de la derrota, y de aquí 15 dias estoy de nuevo ilusuionado con ir a ver al equipo...no sé...ya veremos....

Ahora viene la parte dura del calendario para jugar contra los equipos punteros de nuestra liga. Si se cumple la premisa de que jugamos mejor contra los equipos de arriba, toca ver buenos partidos en las próximas fechas. Ojalá seamos capaces de sacar buenos resultados y dejar definitivamente el fantasma del descenso a un lado, para acabar disfrutando plenamente de la categoría el tramo final de la temporada.